-Una chica superficial,de caprichos cumplidos y sonrisas
tontas.
Le conoció.Un chico de unos diecinueve años de edad,bastante mayor para Alice.Pero ella no podía resistirse a su melena rubia y a sus ojos claros,que desvelaban todo lo que él era,un auténtico rompe corazones.Se podía asimilar sin ninguna duda,que Karl no era de familia adinerada, que no se podían permitir hablar con personas como Alice.Ella una chica de las familias más respetuosas de todo el país,enamorada de un humilde adolescente con ninguna consideración social.¿Que podrían llegar a pensar sus padres si se enteraran?Alice no quiso pensarselo más de dos veces,eso le haría dudar de Karl,de su amor,y de lo que ahora sentía por él.
Él llegaba al metro ochenta de altura,y Alice debía ponerse los tacones más altos que pudiera encontrar en las tiendas más caras del centro de New York.Apenas podían pasar tiempo juntos,ya que Alice estudiaba en la universidad y por las tardes debía dedicárselas a leer libros,bailar y otras miles de actividades,que antes parecían serle interesantes para su futuro,pero ahora,no tenia ningún sentido.El tiempo que Karl iba a ver a Alice,se iba en segundos.Acostumbraban a verse cerca de la casa de Karl,donde crecían enormes plantas de trigo,cuyas eran el escondite adecuado donde vivir un amor breve pero intenso.
-Karl no quiero irme
-Tus padres te están esperando Alice,ya casi dan las nueve,debemos ir
-No Karl,déjame quedarme aqui,contigo
-Vamos Alice,
-Que no,yo soy feliz aquí a tu lado
-Alice,escucháme no puedes quedarte aquí,tus padres te buscarán,y yo seré el culpable de todo esto
-Pues fugemonos,vayámonos lejos,pero llevame contigo Karl,por favor
-No podrías aguantar viviendo en las condiciones que yo vivo Alice,ni siquiera sé si podría convivir contigo
-¿Porque?Acaso no me amas,Dímelo
-No me refiero a eso Alice,venga te llevo ya a casa
-Suéltame,dime porque no vivirías conmigo
-Alice,la vida no es tan fácil,de donde sacaremos dinero para comer,para mantenernos vivos los dos,¿acaso tu vas a trabajar?
-Mmm...
-¿Sabes hacer algo Alice?
-¿Tú podrías aprenderme no?
-Vamos Alice,no seas ingenua
-Karl yo quiero irme contigo,no me importa si no tengo todo lo que me han dado hasta ahora,o si tengo que trabajar,o no comer algunos días.Incluso podría trabajar aquí contigo Karl.
-Jaja,Alice anda,no digas tonterías
-Jaja,Alice anda,no digas tonterías
-De verdad Karl,dejame irme contigo,déjame intentarlo
-Sube al coche
-¿A dónde vamos?
-A intentarlo Alice
A partir de ese instante,Alice ya no soñaba amanecer cada mañana en la casa al lado del mar,ni quería la isla,ni todas las cantidades de vestidos que llegó a almacenar en aquel cuarto.Ya no quería criadas,ni joyas,ni dinero,ni clases de baile inútiles nunca más.
Lo que ella quería desde ese momento,era amanecer a su lado,abrir los ojos después de una fría noche,y ver que todo lo que ella quería,estaba ahí.
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